OliNo Energías Renovables

Hoy en día hay muchos que anuncian sistemas eléctricos de calefacción por suelo radiante, a veces mediante la manipulación de los números, y las tasas sugieren que esto es más barato que la calefacción convencional con una caldera. En realidad, el costo del calentamiento con agua (la calefacción convencional) es considerablemente más bajo y esta forma de calefacción también es significativamente más ecológica.

En general, es fácil instalar calefacción eléctrica. No hay tuberías de agua que se deben conectar al circuito existente de calefacción. Pero hay solamente una colchoneta muy delgada que es fácil aplicarse en en un piso. Esto necesita sólo una capa delgada de cemento y / o de baldosas, así que no necesitas mucha energía para calentar el piso mismo y  se sienta y el calentador más directo que hace el calentamiento de agua.

En la Internet, se ofrecen mucha variedad de los sistemas eléctricos de calefacción por suelo radiante, y principalmente se mencionan los beneficios, tales como bajos costos de inversión.
Algunos vendedores inventan otras ventajas, tales como los costos de calefacción más bajas mencionando tarifas de electricidad muy bajas contra las del gas, y asi calculan que el calentamiento eléctrico de toda la casa sería ventajoso. Por ejemplo, poner la calefacción por la noche (cuando no necesitas la calefacción y la temperatura exterior es baja) a una tarifa de electricidad de noche.

Un poco de aritmética.

Un metro cúbico de gas, durante la combustión en una caldera, subministra tanto calor como 9 kWh de energía eléctrica. Teniendo en cuenta la relación calidad-precio (un metro cúbico de gas cuesta € 0,57 por m3 y 9 kWh cuesta 9 x € 0,22 = € 1,98) se calienta eléctricamente alrededor de 3 ½ veces más caro que con gas. Además, la energía eléctrica es una forma alta de calidad de energía, suya aplicación para calentar debe minimizarse. En efecto, en la producción de electricidad en plantas, aproximadamente 65% de la energía viniendo de la combustión es calor que se pierde. El uso directo de esta energía (el calor) para la calefacción es, pues, aproximadamente el 65% de combustible fósil ahorrado.

Más adelante muestro en una tabla, comparo los costos del calentamiento de una casa, utilizando una caldera de calefacción central con la necesidad anual de 1500 m3 de gas natural con una calefacción eléctrica.

Aquí supongo que la eficiencia total con la caldera es 90 % por la perdida de calor por los tubos. Entonces se necesita 10 % más gas.
También se debe tener en cuenta el consumo de energía eléctrica (80 W) de la bomba de la caldera, que cada año durante los 210 días tiene 10 horas de funcionamiento y la tasa de mantenimiento de la caldera (80 €) y la depreciación anual (aproximadamente € 2250/15).

Para el cálculo de las emisiones de CO2, he consultado la página web www.co2.nl.
La tabla muestra que el costo anual de la calefacción eléctrica de una casa es de aproximadamente 2,4 veces mayor que con la calefacción con una caldera. La emisión de CO2 es 2,9 veces más grande.

Notas:

• La calefacción eléctrica de una casa en la noche es más barato por el precio más bajo, pero con una fina capa de cemento el efecto de búfer es pequeño y esto baja la ventaja de la baja tasa de electricidad por la noche. Y una capa de cemento más espesor hace perder el tiempo corto de reacción de calentamiento.

• Calentar eléctricamente un cuarto de baño en modo continuo, también es más caro que calefacción convencional. Entonces se puede utilizar un temporizador eléctrico, cuyo uso se limita a estos períodos, en los que uno realmente hace uso del baño.

• La eficiencia de una caldera es mayor cuando el ajuste de la temperatura de agua es menor. Esto es debido al calor de la condensación de la combustión de gas, que a una temperatura baja del agua se utiliza mejor. Es aconsejable ajustar esta a hasta 60 grados, por supuesto, siempre que la capacidad total de los radiadores lo permite. Si la temperatura ambiente no se alcanza, se debe aumentar la temperatura del agua.